Los científicos han investigado, que alrededor de los 50 años, se encuentra el punto de inflexión biológica que define en que forma vamos a envejecer. No cabe duda que ahora el ser humano vive por más tiempo, por eso lo ideal es tener una longevidad saludable.
Es muy importante fortalecer en cada uno de nosotros, nuestros aspectos biológicos, sociológicos, psicológicos y espirituales, de ésta manera frenaremos el envejecimiento y renovaremos con inteligencia la segunda mitad de la vida de muchos de nosotros.
El Dr. Juan Hitzig, famoso gerontólogo, plantea que el “ cerebro es un músculo fácil de engañar, si sonríes cree que estás contento y te hace sentir mejor “. Explica que el pensamiento es un evento energético que transcurre en emoción, un movimiento neuroquímico y de hormonas que cuando es negativo hace colapsar a nuestro organismo físico en forma de malestar, enfermedades e incluso muerte.
El científico Hitzig plantea que las conductas con R: resentimiento, rabia, reproche, rencor, rechazo, resistencia, represión, son generadoras de Cortisol y ya saben el daño que ésta hormona le hace a nuestra sangre y a su vez a nuestro Sistema Inmunológico. Estas conductas R, generan actitudes D: depresión, desánimo, desesperación, desolación. En cambio las conductas con S: serenidad, silencio, sabiduria, sabor, sexo, sueño, sonrisa, socialización, generan Serotonina, hormona que produce tranquilidad, aleja las enfermedades y retarda la velocidad del envejecimiento celular. Las conductas S, generan actitudes A: ánimo, aprecio, amor, amistad, acercamiento.
Otras reflexiones del Dr. Hitzig: – Presta atención a tus pensamientos pues se harán palabras. – A tus palabras pues se harán actitudes.- A tus actitudes porque se harán conductas. – A tus conductas porque se harán carácter y a tu carácter porque se harán biología.
Se puede superar varias infidelidades
Superar varias infidelidades es posible, pero requiere un compromiso significativo de ambas partes. Es fundamental abordar el problema con comunicación abierta, terapia de pareja, y un fuerte deseo mutuo de reconstruir la confianza. Cada situación es única y depende del grado de arrepentimiento, la voluntad de cambiar y la capacidad de perdonar y aprender de los errores. Sin embargo, es crucial evaluar si ambas personas están verdaderamente dispuestas a trabajar arduamente en la relación para sanar y avanzar juntos.