Para hablar de la comunicación en la pareja, hay que tener en cuenta que en la relación existen dos maneras de ver e interpretar el mundo de manera diferente y por ello encontrar una forma de aproximarse adecuadamente es muy importante. La pareja necesita conocerse a profundidad, desarrollar confianza, afecto y respeto por el otro, sentirse valorada, apoyada, ser escuchada y entendida.
En la necesidad de vincularse, cuando pasa la etapa del enamoramiento, algunas veces la pareja empieza a comunicarse inadecuadamente de forma pasivo, agresiva en la que la manipulación está presente.
Cuando el lenguaje emocional entre los dos miembros es distinto, este puede generar diferencias entre ambos por lo que aprender a poner límites sin ponerse a la defensiva evitará el escalamiento en las discusiones, lo cual afecta el bienestar de la relación.
Es importante dialogar para evitar malentendidos haciendo una pausa, darse un tiempo fuera informándole a la pareja que necesita un momento para estabilizarse y volver a retomar la conversación en otro estado emocional.
Hay que tener en cuenta que la actitud de los miembros es muy importante para entender al otro, por lo que en las interacciones debe haber una actitud empática sin juicios que permita al otro expresarse para buscar soluciones que ayuden a satisfacer las necesidades de ambos.
Igualmente es necesario ser asertivo para hablar desde la franqueza siendo directos, comprometiéndose en buscar soluciones sin herir los sentimientos del otro ni menospreciarlo y así poder llegar a establecer un lenguaje común y efectivo ser congruentes con lo que decimos, dar información positiva, escuchar al otro y tener en cuenta tanto la comunicación verbal como la no verbal, cuidar el volumen que utilizamos, el tono, la distancia que ponemos con nuestra pareja, cuidar el contacto visual, los gestos, Tratar de hacer preguntas, dar toda la información adicional necesaria para evitar malentendidos, tomar la palabra, pasar la palabra, cerrar la conversación… No negar nuestra responsabilidad y no responsabilizarnos de lo que es del otro.
El objetivo común es conseguir expresar, de manera honesta y directa los sentimientos, consiguiendo así́ producir cambios en la relación con el fin de poder estar más a gusto y disfrutar de ella.
Juanita Holguin Ordóñez
Psicóloga/ Terapeuta familiar sistémica
